¿Por qué la Mesa de Escritores de la Araucanía asumió la denominación de Juan Pablo Ampuero?

¿Por qué la Mesa de Escritores de la Araucanía asumió la denominación de Juan Pablo Ampuero?

"Para las personas de nuestro Temuco que tienen mayor o menor proximidad al quehacer literario, la respuesta resulta obvia; porque es de toda justicia luchar por la pervivencia de una figura prócer del siempre arduo mundo de las letras."

Rafael Storni


lunes, 21 de febrero de 2011

Enrique Parra en T21






Tiempo21 n°114

Poetas del mundo en Temuco

martes, 15 de febrero de 2011

El escritor y la TV en Chile

Encuentro poetas del mundo

lunes, 7 de febrero de 2011

Segundo y el cronómetro






Segundo es un cronopio muy medido. Estoy hablando de Segundo Antares, un agudo escritor de Río Negro, que lleva al máximo la máxima de Baltasar Gracián (un jesuita que fue mejor leído en Alemania que en su propia tierra) que reza “lo bueno, si breve, dos veces bueno”. O tal vez debiéramos decir que lleva la máxima al mínimo, o el mínimo al máximo (suban estrujen bajen). Segundo –que en realidad se llama Mauricio, no se lo digan a nadie- anda con su libreta capturando conceptos, exprimiendo ideas, y alineándolas. De entre sus hallazgos, no es raro encontrar destellos de genialidad, como este:

MEDIO AMBIENTE
Efectivamente, nos va quedando la mitad.

Dijo Segundo en una lectura de sus escritos (microrrelatos en su mayor parte, y también poemas) que la sociedad de hoy reclama inmediatez, y que sus obras están en consonancia con esta exigencia. O tal vez quería decir sencillamente que no tenemos tiempo para detenernos y que en el tráfago sólo es posible intercalar alguna línea suelta, acaso de manera semejante a los intermitentes anuncios publicitarios o a las rápidas líneas parpadeantes de la carretera. Puede que tenga razón. Tal vez la literatura no tiene lugar, y la única manera de sobrevivir sea adaptarse al medio. Quizá su afán y su éxito consisten en sacar a la literatura de los márgenes, y usar esas líneas como palos en la rueda para ponernos la zancadilla, para sorprendernos o sencillamente para entretenernos, que no es poco.

De todas formas hay algo de limitante en la brevedad. Es como si en tan breve espacio no se pudiera llegar a aparecer. Comentó el propio Segundo Antares de dónde venía su nombre, que es su pseudónimo: Antares es una fase de un juego que le demandaba superarse por su gran dificultad. Esa superación, al parecer, le lleva a buscar la dificultad, el ingenio al máximo, como un reto mental: el menos es más del minimalismo (-=+). No es raro, sin embargo, que en algunas sagas vuelvan a interesarse por el origen del héroe para continuar la historia. Quizá el tercer Antares, el Antares que supera al Segundo, esté antes de éste y sea simplemente Mauricio, que tiene mucho más nombre de cronopio, que acaso no se preocupa del cronómetro, que tiene algo que contar sin contar el tiempo, y que a buen seguro, nos daremos el tiempo de escuchar.



Edición n°112 de Tiempo 21

sábado, 5 de febrero de 2011

Columna de Anibal Barrera en T21 n°111

Labrín, una vez más