¿Por qué la Mesa de Escritores de la Araucanía asumió la denominación de Juan Pablo Ampuero?

¿Por qué la Mesa de Escritores de la Araucanía asumió la denominación de Juan Pablo Ampuero?

"Para las personas de nuestro Temuco que tienen mayor o menor proximidad al quehacer literario, la respuesta resulta obvia; porque es de toda justicia luchar por la pervivencia de una figura prócer del siempre arduo mundo de las letras."

Rafael Storni


jueves, 28 de octubre de 2010

Humorismo parriano: Algo más que cosquillas.

Columna publicada en el número 89 del semanario Tiempo21.





Al leer antipoesía quizás el rasgo más evidente del que puede percatarse el lector es la presencia innegable de un sustrato cómico, en el cual convergen, en mayor o menor medida, desde la picardía hasta el humor negro, pasando por la ironización y la sátira.
El campo de acción del humor parriano -dado en todo tipo de producción antipoética, (haciendo la salvedad que no todo es expresado en forma humorística ni hace referencia a contenidos o temáticas cómicas)-, desde mi punto de vista, pretende provocar, mediante la utilización de los atributos del chiste, una descompensación perceptual que desarticule cognoscitivamente (en términos de asociación, logicidad, análisis y síntesis) las nociones y presupuestos con que el lector se enfrenta a la lectura antipoética, puesto que la incorporación al terreno poético de un humor procaz, desenfadado, agudo, picaresco, sin sofisticación ni elegancia -y no por ello falto de inteligencia-, sino que al modo en que se da en el habla popular chilena, susceptible de ser decodificado por el “hombre medio”, además de constituir una transgresión literaria que democratiza la poesía, suscita una disonancia en el destinatario, dada por las discrepancias en las expectativas de lo que todo lector de poesía espera encontrar y no encontrar en ella.
Es poesía que no parece serlo, precisamente por transgredir la solemnidad literaria de la vertiente poética tradicional mediante el recurso del humorismo, el cual, aplicado en un terreno en que era común sembrar amargas consideraciones, nostalgias, etéreos amores y desamores, pinchosas reflexiones... hace germinar, por medio de la catarsis a la que invita, honestas sonrisas y risotadas, no exentas de reflexión y crítica, elementos también constitutivos de su arte poética (visible es el compromiso con temáticas como la ecología, el contexto político, la modernidad, el paradigma religioso, por ejemplo).
Sin duda, hacer poesía en Chile se confronta al antes y el después de este referente (hasta que no se demuestre lo contrario).

Segundo Antares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario